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miércoles, 24 de septiembre de 2025
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Malos hábitos y anemia: ¿Cómo afectan su salud?

Descubra cómo malos hábitos diarios pueden causar anemia y aprenda a prevenirlos con una alimentación adecuada y un estilo de vida saludable.

Malos hábitos y anemia: ¿Cómo afectan su salud?

Malos hábitos y anemia: ¿Cómo afectan su salud?

La anemia es una afección que ocurre cuando el cuerpo no tiene suficientes glóbulos rojos sanos para transportar oxígeno a los tejidos, lo que causa síntomas como fatiga, debilidad, mareos y piel pálida. Aunque a menudo se asocia con una deficiencia de hierro, la anemia puede ser el resultado de diversos factores subyacentes, muchos de los cuales están directamente relacionados con nuestros hábitos diarios.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que el 24,3% de la población mundial padece anemia, siendo la deficiencia de hierro la causa más común, especialmente en mujeres en edad fértil, embarazadas y niños pequeños.

Entender los malos hábitos que contribuyen a su desarrollo es el primer paso para prevenirla y mantener una buena salud. A continuación, exploraremos los factores clave que inciden en la aparición de esta afección y cómo evitarlos.

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Los hábitos alimenticios y la absorción de nutrientes

La causa más común de anemia es la deficiencia de hierro, un mineral esencial para la producción de hemoglobina, la proteína de los glóbulos rojos que transporta el oxígeno. Una dieta baja en hierro es el principal factor de riesgo, pero la forma en que consumimos otros alimentos también afecta la absorción.

Por ejemplo, el consumo excesivo de té y café con las comidas puede inhibir la absorción de hierro, ya que contienen taninos que se unen a él y evitan que el cuerpo lo utilice. De igual forma, una dieta rica en calcio puede interferir en la absorción del hierro, por lo que es recomendable evitar el consumo de lácteos al mismo tiempo que se consumen alimentos ricos en este mineral.

Por otra parte, la falta de vitamina C es un factor crítico. Esta vitamina es fundamental para que el cuerpo absorba el hierro de forma efectiva, especialmente el hierro de origen vegetal. La vitamina B12 y el ácido fólico también son importantes para la producción de glóbulos rojos.

Hábitos que causan anemia

La anemia es una afección que ocurre cuando el cuerpo no tiene suficientes glóbulos rojos sanos, y la falta de vitaminas y minerales es el factor más común. Sin embargo, existen otros hábitos y causas que pueden incidir en su desarrollo. Por ejemplo, el abuso del alcohol puede afectar el metabolismo del ácido fólico, lo que conduce a una anemia por deficiencia de esta vitamina.

Además, algunas personas pueden tener una mala absorción de nutrientes debido a enfermedades del sistema digestivo. Incluso el uso prolongado de ciertos medicamentos, como los antiácidos, puede interferir con la absorción del hierro. Identificar y corregir estos hábitos es clave para prevenir la afección.

IMAGEN2: como evitar la anemia

como evitar la anemia
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Estrategias para evitar la anemia

Evitar la anemia es una cuestión de conciencia y disciplina. El primer paso es adoptar una dieta equilibrada y variada. Los alimentos ricos en hierro se dividen en dos categorías: hierro hemo (de origen animal) y hierro no hemo (de origen vegetal). El hierro hemo se encuentra en carnes rojas, aves y mariscos, y el cuerpo lo absorbe fácilmente.

El hierro no hemo está presente en alimentos como lentejas, frijoles, espinacas y tofu, y su absorción puede mejorarse al consumirlos con alimentos ricos en vitamina C, como los cítricos, los pimientos o las fresas. Para combatir los hábitos que inhiben la absorción de hierro, evite tomar café o té inmediatamente después de las comidas.

También, intente espaciar la ingesta de calcio con la de alimentos ricos en hierro para maximizar la absorción de ambos. Si usted sospecha que tiene una deficiencia, hable con su médico, quien puede recomendar un análisis de sangre y, si es necesario, prescribir suplementos de hierro o vitaminas, junto con pautas nutricionales.

Dieta y anemia

La dieta juega un papel fundamental en la prevención de la anemia. Asegúrese de incluir fuentes de hierro tanto hemo como no hemo en sus comidas. Para las personas vegetarianas o veganas, es fundamental planificar sus comidas para garantizar la ingesta adecuada de hierro no hemo y su absorción.

Por ejemplo, al preparar un plato de lentejas, puede añadir un chorrito de limón o acompañarlo con una ensalada de pimientos, ya que ambos son ricos en vitamina C. El consumo de alimentos ricos en vitamina B12 (carnes, lácteos, huevos) y ácido fólico (hojas verdes, legumbres) también es vital para la producción de glóbulos rojos y la prevención de otros tipos de anemia.

síntomas de anemia
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Reconocimiento de síntomas y consulta profesional

La anemia por deficiencia de hierro suele desarrollarse lentamente, por lo que los síntomas pueden ser sutiles al principio. La fatiga constante y la falta de energía son las señales más comunes. Otros síntomas pueden incluir mareos, dolores de cabeza, piel pálida, falta de aliento al realizar ejercicio, uñas quebradizas y la sensación de tener las manos y los pies fríos.

En los casos más severos, puede causar un ritmo cardíaco acelerado. Si usted experimenta estos síntomas de forma recurrente, es vital que no se autodiagnostique ni se automedique. La anemia tiene múltiples causas, y la suplementación de hierro sin una causa comprobada puede ser peligrosa. La mejor opción es siempre acudir a un médico que pueda realizar un diagnóstico preciso y prescribir un tratamiento adecuado para sus necesidades.

Deficiencia de hierro

La deficiencia de hierro es la principal causa de anemia en todo el mundo y es una de las deficiencias nutricionales más comunes. Aunque afecta a personas de todas las edades y géneros, es más común en mujeres en edad fértil debido a la pérdida de sangre durante la menstruación, en mujeres embarazadas debido a la alta demanda de hierro, y en niños pequeños que están en una etapa de rápido crecimiento. La prevención, mediante una dieta rica en hierro y vitaminas, es la mejor forma de combatirla.

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